El acero inoxidable tiene una elegancia natural y una serie de características que lo convierten en el material perfecto para utilizar en la cocina. BLANCO fabrica sus productos con acero inoxidable de la más alta calidad, seleccionándolo según criterios específicos y estrictos controles de calidad. Esto se traduce en la producción de modelos resistentes y de fácil mantenimiento en comparación con otras clases de acero inoxidable.
Además, con su tono neutral, el acero inoxidable se integra magníficamente en cualquier diseño de cocina. Es exclusivo, completamente atemporal y siempre se mantiene brillante.
Encontramos numerosos beneficios en aquellos fregaderos que están compuestos por este material:
- No se oxida.
- Resiste al calor y a la luz solar.
- Ofrece un alto grado de higiene: la superficie metálica es totalmente lisa y sin poros, dificultando que las partículas de suciedad y las bacterias se adhieran.
- Con gran nivel de resistencia: soporta de manera excelente los ácidos utilizados en el ámbito doméstico y a las manchas causadas por el café o ciertos tipos de fruta o verdura.
- De fácil mantenimiento: si se utilizan productos específicos para su limpieza diaria como el BLANCO POLISH, se consigue una superficie brillante durante décadas y con los mínimos cuidados.
El acero inoxidable de BLANCO es la apuesta segura para una zona de aguas con las más altas prestaciones y durabilidad. Siempre manteniendo la elegancia y el atractivo deseados en el espacio de cocina.